entre varias frases se explayaba aquel famoso discurso del 25 de Mayo
de 2003, cuando el entonces presidente Néstor Carlos Kirchner inauguraba un
nuevo ciclo en la vida de los argentinos, dando una vuelta de página a los
terribles acontecimientos vividos en diciembre de 2001, gracias al prolijo
reordenamiento de la economía que luego Eduardo Duhalde supo aplicar, de la
mano de un equipo de profesionales de lujo. Fue así como entonces Kirchner
asume un país en situación de despegue, acompañado por un escenario
internacional nunca antes tan favorable para nuestro país como para toda la
región latinoamericana.
Si no hubiera existido el lamentable episodio de las muertes de Kosteki y Santillán, tal vez otra hubiera sido la suerte de la Argentina, porque Eduardo Duhalde podría haber encarado un segundo periodo como presidente electo, y así afianzar el proceso de recuperación económico que él había iniciado. Pero siempre nuestro país sucumbió a los desencuentros que se producen dentro del peronismo, cuando sus luchas intestinas pujan por el control y dominio del poder real. Así como la serpiente Ouroborus, se fagocita asimismo para luego vomitar un nuevo “engendro” salido de su mismo vientre. Tal es el momento en el cual estamos hoy transitando, en vistas a los comicios del domingo 27 de Octubre: La Serpiente esta por parir a un nuevo caudillo. No menos trascendente será que también se cumplen 3 años de la muerte de “El Furia”.
Hoy Cristina no está bien de salud. Tal vez eso le traiga algún recuerdo borroso de aquel 27 de Octubre donde tuvo que vivenciar momentos dolorosos como los que hoy, sus hijos atraviesan por ella. La vida da vueltas y todo vuelve a suceder. Ayer como espectador y como protagonista
Casualidad o no, dos hechos de profundo impacto en un mismo día, no suelen darse a menudo. Más aún si le anexamos el delicado estado de salud de Cristina Wilhelm, de quien poco se conoce si nos referimos en términos médicos, a cuál es su verdadero estado. Hasta eso le han quitado al pueblo argentino: el derecho a saber sobre la salud presidencial, tema que es de interés público, y no exclusivo del círculo íntimo o del gobierno. Lo cierto es que Cristina no podrá cumplir el arrogante deseo de recordar el aniversario de la muerte de su esposo como a ella le hubiera gustado, seguramente, a través del uso de la cadena nacional. La militancia Kirchnerista no hará a un lado este evento, y en varios lugares del país estará dando su ¡Presente, Néstor!
En esta oportunidad no vamos a hondar sobre los hechos de su gestión. Es cierto que hubo cosas buenas, pero también se infringieron graves errores que más tarde causaron mucho daño al país. Las políticas que propendieron a instalar una gigantesca matriz de corrupción, termino por dinamitar el sueño que él había venido a proponer a los argentinos: una Argentina como alguna vez Perón les dio. Viéndolo a la distancia, a la altura de las actuales circunstancias, lo que él hizo durante su mandato no puede compararse con lo que vino después.
El Perón del 73. Su proyecto de pasificación y unión de los argentinos no pudo plasmarse. Así tampoco el proyecto que Néstor Kirchner quería consolidar con una ininterrumpida sucesión presidencial del matrimonio en el poder
En el 2007 la administración que encabezo su esposa, comenzaba a dar los primeros síntomas de inflación. Un ajuste temprano y bien aplicado, hubiera evitado todos los males que posteriormente se fueron dando. Pero también la decisión de aplicar políticas erradas como la intervención del INDEC, mantener Tarifas Subsidiadas, consolidar el vínculo con Venezuela y las denuncias de los casos de corrupción, sobre pesaron de algún modo poniendo en duda las virtudes del Modelo. Luego comenzaron a sumarse protestas del orden social, llegando a producirse el asesinato de Ferreira, donde muchos sostienen fue un hecho muy duro que afecto la salud de Néstor Kirchner, provocándole un gran disgusto y posteriormente, la muerte. Una de las tantas teorías, que se manejan dentro de otras tantas, donde responsabilizan directamente al entorno familiar sobre su deceso.
Pasaron tres años de aquel 27 de Octubre de 2010, fecha en la cual se había propuesto realizar un censo nacional de personas. La noticia comenzó a correr por las redes sociales y medios de comunicación, dando cuenta desde horas tempranas sobre una descompensación que había sufrido el ex presidente. En poco tiempo, se supo que Néstor Carlos Kirchner había fallecido a los 60 años de edad en la ciudad de El Calafate, provincia de Santa Cruz. Según el parte médico oficial, el ex mandatario murió como consecuencia de un paro cardiorrespiratorio no traumático, a las 9:15, en su residencia de Los Sauces, donde se encontraba junto a su esposa, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
VIVIÓ ACUMULANDO PODER Y DINERO. NO TUVO SUFICIENTE TIEMPO PARA GASTARLO. EL 27 DE OCTUBRE DE 2010 DEJO DE EXISTIR ABRUPTAMENTE, Y ES HASTA EL DÍA DE HOY QUE MUCHOS SE PREGUNTAN ¿PARA QUE ROBO TANTO?
SIN EMBARGO LOGRO METERSE EN LA PIEL DE MILES DE CIUDADANOS QUE CREYERON QUE CON EL, LA ARGENTINA VOLVERÍA A SER,
"LA ARGENTINA QUE LES DIO PERON".
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