Nada nuevo en otro año mas del conductor de Show Match. ¿Hasta cuando?
Triste,
lamentable, patético, decepcionante, fue el espectáculo dantesco de ayer en la
"TV Publica" del 13. Si, realmente ayer los políticos que supimos
conseguir, dejaron en manifiesto que esta Argentina "Cambalache" sigue
en estado febril y calamitoso desde el punto de vista de la dignidad y ética,
que todavía no reina por estas tierras. Es que el populismo se llevó puesto
hasta los inodoros del Sheraton y el Ceasar Park Hotel. Ya no hay manera de trazar
la raya para saber distinguir quienes siguen
en la “joda caribeña” y quienes realmente apuestan a dinamitar el modelo que
destruyo este país y lo lleno de infradotados que solo les interesa nivelar
hacia abajo en todos los estándares de nuestra ya degradada sociedad. Si hasta
el más lúcido jurista de 97 años que integra la CSJN está puesto en duda sobre
sus facultades mentales. ¿Qué más podemos esperar para el resto de los mortales
que no ostentamos semejante responsabilidad institucional?. Vaya tarea faraónica
de reconstrucción de principios, ética, derechos y obligaciones que le estamos
endosando a las generaciones futuras… No me digan que esto es pasajero, porque todavía,
no llego lo peor.
"Los
inmorales nos han igualado". Que frase la del gran Dicepolo, tan certera y
contemporánea en estos momentos de tremenda incertidumbre y desazón que estamos
atravesando, donde se juega ni más ni menos la esperanza del comienzo de algo
distinto o el fracaso de continuar igual y para peor. Lo que más indigna es ver
a este arlequín payasesco, conductor de Tv, que se cree el ombligo del mundo,
al cual la mayoría de sus seguidores (incluso muchos políticos) están
pendientes año tras año, donde viene "robando” con la misma idea, apenas
maquillada un poco cada año, para refregarnos en la cara diciéndonos,
"Miren como me burlo de la realidad mientras Uds. desde sus hogares,
consumen mi producto que me hizo rico & famoso. Gracias Gilada por estar
del otro lado! No se mueran nunca! Porque yo sin Uds. no hubiera llegado hasta aquí.
Pero Uds. sigan quedándose allí, en el pozo y en la miseria, mientras yo, medio
año laburo y medio año me la paso viajando por el mundo”. ¿No es tierno y
acogedor? De esa misma manera, con otros instrumentos, es lo que hizo y hace un
gobierno populista como el que padecemos. Ni los que se dicen ser peronistas de
la mejor cepa, han evitado que la memoria de su líder, sea mancilladla y
escupida como lo hizo el matrimonio feudal K. Y lo peor que aquellos que no
comulgamos con este régimen faccioso, lo venimos sufriendo hace más de 70 años.
Porque eso es lo que gobernó la Argentina: un cabaret al mejor estilo Folies Bergere
que solo cambio de elenco pero mantuvo la misma fachada, decorado y espectáculo.
Pero en el fondo, siempre fue el maldito populismo el que reino en este país, mal
que nos pese.
Salvo algunas excepciones como el espectaculo de Stravaganza, el resto fue artilugios tecnologicos y mucho humo...
La
gente que apoya este modelo, no sabe hacer otra cosa que no sea ejercer la vagancia o vivir
de lo ajeno. El Espíritu de Sacrificio no existe en el léxico populista-peronista.
Tampoco resulta muy atractivo o deseable como esa bebida cola en las
publicidades, ya que a los argentinos nos pesa mantener una conducta intachable
como también respetar y hacer respetar las leyes y las instituciones. El
esfuerzo, la tenacidad, el valor por lograr un cambio de raíz en nuestra
cultura ciudadana que nos permita dejar bien atrás y lejos en el tiempo, todos
estos desbandes que produjeron esta clase de gobiernos (en su esencia
autoritarios), murieron junto con el sueño de aquellos pro hombres de nuestra
historia, que pensaron alguna vez en una gloriosa y respetable nación. Y no
exagero al decir esto sino, ¿porque hemos llegado a caer tan profundo en este agujero
negro del que no sabemos cómo saldremos todavía…? De los tres pre-candidatos ninguno se ve que tome
la bandera de estos preceptos a los que acabamos de aludir, sin temor a que sus
candidaturas sufran un revés en las encuestas.
Todos
se están cuidando en sus discursos de decir algo que pueda dejarlos fuera de foco o atentar contra el principal objetivo
que es ganar a cualquier precio y en primera vuelta si es posible. Sus
apariciones en el programa Show Match de este Lunes pasado, acaba de dinamitar la
poca seriedad que se esperaba debía tener la campaña. Se han prestado
inescrupulosamente a un Circo innecesario, secundado por imitadores de sus
propias personalidades, que no han hecho más que ponernos a todos los
argentinos en ridículo, frente al mundo. En lugar de hacer un debate de ideas,
de pensamientos, de estrategias, no solo se vio la chabacanería interminable a
la que nos tiene acostumbrados el conductor televisivo, sino que una vez más,
probo no tener creatividad e innovación en el primer programa de presentación, salvo
la de algunas personalidades del espectáculo teatral que merecen un
reconocimiento. Pero aun así necesitamos encontrar en esta contienda "farandulera electoral" que ya comenzó, alguien que nos seduzca y logre captar nuestra atención, aunque
sea con promesas difíciles de cumplir o alguna que otra mentirilla, que nos
haga creer que aún, hay una puerta de salida aunque ésta se abra hacia el
precipicio.
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