..."Muchos de nosotros experimentaremos extrañas sensaciones como una inédita paz
interior pero también alteraciones en los principales centros neurálgicos de
nuestras mentes. El resultado final de este evento cósmico arrojara un beneficio
de inventario para aquellos que sepan aprovecharlo".
Muchos
de nosotros nos preguntamos últimamente que es lo que esta pasando con el
planeta y su gente. Algunos todavía no logran dilucidar el motivo principal.
Otros relacionan los hechos con la llegada del 2012 y las profecías Mayas que
hablan de un fin de ciclo y el comienzo de una nueva era. Sea como fuere, en
cierta medida la mayoría de las personas comenzaron a hablar sobre ciertos
cambios sintomáticos que experimentan en sus cuerpos y psiquis variando los diferentes
estados de ánimo que van desde cansancios extremos, desgano, aburrimiento, e incluso perdida del apetito. Pero estos
cambios también se dan del lado opuesto, donde muchos se sienten revitalizados
con una energía que jamás antes sintieron, y con predisposición a ver las cosas
más positivamente.
Desde
el punto de vista científico diríamos que parte de estos cambios que están sucediendo
se deben a la inactividad del sol conocida como mínima solar o periodo de sol
quieto , donde además los astrónomos preocupados por estos sucesos han
observado pocas “llamaradas” y ninguna mancha solar, las cuales podrían estar
alterando el clima y la vida en nuestro planeta. Estas variaciones energéticas también
repercuten en nosotros, que como seres humanos al igual que el planeta tierra,
poseemos un campo magnético llamado campo biológico o bioplasmático. Nuestro
cuerpo físico esta formado por células vivas con cargas eléctricas, que cuando
las pierde o se desgastan, es el instante en que morimos o desencarnamos, transmutándose
ese cuerpo físico en cuerpos etéreos o astrales. Cada una de esas células son
como pequeñas pilas eléctricas que mantienen la energía de nuestro organismo,
que al estar constituidas en el cuerpo físico, necesitan como alimento tanto la
energía que proviene del sol, como la de una adecuada y sana alimentación, donde
luego la combinación de ambas, puedan armonizar y equilibrar la mente, el
cuerpo y el espíritu.